Esta pareja pasó 26 años resucitando un bosque que compraron en 1991. Así luce ahora

La transformación realmente te quita el aliento.

Pamela Gale Malhotra y su esposo, Anil, son dueños del Santuario Sai, el único santuario privado de vida salvaje en la India y donde han tenido que hacer grandes esfuerzos para volver a plantar sus bosques y proteger la vida natural desde 1991. Hoy, el santuario cubre más de 121 hectáreas y es hogar de más de 200 especies de animales y plantas en peligro de extinción, incluyendo elefantes asiáticos y tigres de Bengala.
“CUANDO LLEGAMOS, LA MAYORÍA DE LAS TIERRAS ESTABAN TOTALMENTE ABANDONADAS. CAMPOS DE ARROZ ABANDONADOS, DE CAFÉ Y CARDAMOMO. HABÍAN DEFORESTADO TODO. Y NOS TOMÓ MUCHOS CUIDADOS, ENERGÍA Y TIEMPO, AÑOS, PARA TRANSFORMARLO”.
El distrito en que se encuentra el santuario, Kodagu, al sur de la India, sufre de extrema deforestación, sin consideración alguna por la gran cantidad de preciosas especies que habitan el lugar.

Pamela y Anil fueron unidos por su amor a la vida natural y decidieron luchar contra la destrucción de la mejor manera posible: construyendo y creando.
La expansión del bosque no fue fácil y no sólo requirió un gran esfuerzo físico de la pareja, amigos, voluntarios y trabajadores. También debieron invertir su dinero de forma inteligente para poder concentrarse en el proyecto y no tener que dejarlo a medio camino.
Y ni hablar de la inversión emocional, sobre todo con campesinos y cazadores sin consciencia ecológica que les hicieron la vida muy difícil. El gobierno indio jamás les prestó apoyo alguno.
Sin embargo, los Malhotra salieron adelante con su proyecto y al observar las imágenes a través del tiempo hay que decir que sus esfuerzos increíbles dieron frutos realmente impresionantes.
“RECUERDO CAMINAR POR EL BOSQUE, NO PODÍAS OÍR MÁS QUE TUS PISADAS. AHORA EL BOSQUE ESTÁ LLENO DE SONIDOS”.
“AHORA SENTIMOS UNA TREMENDA SATISFACCIÓN CUANDO CAMINAMOS POR EL SANTUARIO. NUNCA HE SENTIDO ESTE TIPO DE FELICIDAD ACERCA DE OTRA COSA QUE HAYA HECHO EN MI VIDA”.
¡Realmente impresionante!



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